
Dame tu fuerza, Señor, para hacer mi deber
y seguir tus caminos, oh Dios;
y la gracia también, para permanecer
como tu siervo fiel, Señor.
Tan solo quiero_estar
a tu lado, Señor,
y seguirte por siempre,_oh Dios,
a donde vayas, Señor.
Te pertenezco, Señor;
tú_eres mi todo_y mi Dios;
mi vida te la doy:
¡te pertenezco, Señor!
Cada día, Señor, cargaré con mi cruz
y_a tu lado por siempre_estaré;
a los hombres diré que_ha llegado la luz:
¡la victoria de nuestro Rey!
Tan solo quiero_estar
a tu lado, Señor,
y seguirte por siempre,_oh Dios,
a donde vayas, Señor.
Te pertenezco, Señor;
tú_eres mi todo_y mi Dios;
mi vida te la doy:
¡te pertenezco, Señor!
{¡te pertenezco, Señor!} (3)
