¡Oh ciudad de Dios!, ¡oh ciudad ¡Qué co - sas tan hermo--- sas se dicen de ti!
¡Oh ciudad de Dios!, ¡oh ciudad de Dios! ¡Oh mora--da desea - - da, mi / hogar está / en ti!
Tus cimientos están sobre los montes san—tos, y_el altísimo Dios ama tus puer --- tas. Y / escribe_el Señor al contar a los pueblos: { “Es--te nació / en la ciudad de Dios” } (2)