M,L: David Quintana
Qué / amables tus moradas, oh Señor;
tras de tus atrios anhelará mi / alma.
Mi corazón y mi carne languide↘cen
tras de la casa de mi Dios.
Solo / en ti / hay salvación,
solo / en ti / el descanso de mi / alma;
mi roca, mi fuerza, tú mi / espera↘nza.
Dichoso quien se llena con su Dios.
Qué / amables tus moradas, oh Señor;
tras de tus atrios anhelará mi / alma.
Mi corazón y mi carne languide↘cen
tras de la casa de mi Dios.
Todos los que tienen sed vienen a ti,
se sacian de los bienes de tu casa;
se complacen y deleitan en tu prese?ncia.
Tu_amor es mejor que la vida.
Qué / amables tus moradas, oh Señor;
tras de tus atrios anhelará mi / alma.
Mi corazón y mi carne languide↘cen
tras de la casa de mi Dios.
Dichosos son los hombres cuya fuerza_está / en ti
y tus caminos en su corazón.
Dichosos los que buscan y moran en tu ca↘sa:
verán la faz de su Dios.
Qué / amables tus moradas, oh Señor;
tras de tus atrios anhelará mi / alma.
Mi corazón y mi carne languide↘cen
tras de la casa de mi Dios.
... tras de la casa de mi Dio↗s.
Mi corazón y mi carne languide↘cen
tras de la casa de mi Dios.